Caricaturista y artista plástico chileno, radicado en Costa Rica
tras el golpe militar de Augusto Pinochet. A su llegada al país, "Jano" publicó
en la revista de Excélsior (de 1975 a
1978) y participó en el Salón de caricatura (1975). Publicadas a menudo a color
y en página completa, sus caricaturas aparecen bajo el título Pura vida, nombre que conservó como
identificador de su espacio humorístico hasta el día de su muerte, en la
sección editorial del periódico La prensa
libre (1978 a 1999). De igual forma, Primera
plana, el órgano del Colegio de Periodistas de Costa Rica, difundió sus
obras (1986 a 1990). Su trayectoria como dibujante gráfico inició en el diario chileno
El siglo, con su personaje "Don
Inocencio o el hombre que creyó en promesas electorales", historieta política
publicada diariamente en portada y en medias planas o planas enteras, algunos
sábados o domingos. El fundamento de su humorismo radicaba en la palabra, en
los juegos del lenguaje, en las expresiones populares: así explota la ironía y
el absurdo. Con formación universitaria en artes gráficas con mención en grabado,
realizó más de quince exposiciones individuales y colectivas en Chile, Costa
Rica y China, en las distintas disciplinas y géneros artísticos que practicó. Además
de caricaturista y artista plástico, Osvaldo Salas fue profesor universitario,
diagramador, portadista e ilustrador de libros y
revistas. En grabado, dibujo y cartel -esta última una especialidad con rango
artístico en su país natal- recibió importantes galardones y reconocimientos:
en 1967, obtuvo el Premio Nacional de Periodismo en dibujo periodístico, el
máximo galardón en Chile, y en 1969, la Medalla de Honor en el Concurso
Internacional de dibujo periodístico en Moscú. En 1997, recibió un homenaje en
su tierra natal, por parte del Colegio de Periodistas y un año después en Costa
Rica, cuando varias entidades nacionales e internacionales se unieron para
celebrar la publicación de su libro antológico Pura vida (Editoriales Educa Csuca,
1997), con una selección de veinte años de caricaturas editoriales. En 1998,
como un homenaje más, el cineasta cubano radicado en Costa Rica, Leonardo
Roque, condensó su vida en el documental titulado Jano.